Ponente 166 : Sra. Virginia Guinda Lacalle
Tema: «Importancia de la energía en la competitividad de la empresa del futuro”
La Sra. Virginia Guinda Lacalle es Consultora energética y empresaria. Es Ingeniero Industrial Superior por la Univ. Politécnica de Cataluña, especializada en técnicas energéticas (promoción de 1999) y especialización en finanzas por IESE (2011).
Ha desarrollado sus 20 años de carrera profesional como consultor energético a nivel internacional y actividades de lobby, a nivel nacional y europeo.
A partir de 2008 inicia su carrera empresarial fundando ENERGIA LOCAL, una empresa de consultoría con sede en Barcelona y vocación internacional, enfocada a dar servicios profesionales de alto valor añadido para optimizar el vector energético en las industrias, los negocios y en la mejora de las políticas energéticas.
Es miembro del Consejo Consultivo de Electricidad de la Comisión Nacional de Mercados y Competencia (antigua CNE) desde 2008 en representación de la patronal de cogeneración ACOGEN.
Es presidenta del Foro Energía Empresa de Foment del Treball, la plataforma de Foment para abordar los retos de la energía en el mundo empresarial y miembro de la junta directiva.
Energía Local ha elaborado planes de eficiencia, estudios de potencial, estudios de mercado de precios, planes de infraestructuras, diseño de redes de distrito para distintos Entes, Organismos y Asociaciones como la Comisión Nacional de Energía, el Ayuntamiento de Barcelona, el Instituto Catalán de Energía, el Gobierno Andorrano, el Instituto Catalán de la Salud, la Patronal de cogeneración, la Patronal de Fabricantes de pasta y papel y la Asociación de Empresarios Químicos de Tarragona.
Energia Local asesora a 50 clientes industriales en sectores altamente consumidores de energía (papel, químico, petroquímico, alimentación, extractivo, farmacéutico, etc). Y también a utilities, empresas de servicios energéticos y entidades de capital. El volumen de energía asociado a los clientes de Energía Local es de 5 TWh/a de electricidad (aprox. un 5% de la demanda eléctrica industrial) y 27 TWh/a de gas natural (aprox. 15% de la demanda de gas industrial, unos 27 barcos anuales).
La Sra. Guinda nos destacó la importancia que tiene la energía para el desarrollo de la actividad económica y en especial la actividad industrial. Es la esa actividad industrial la que nos ofrece un PIB y un empleo de mayor calidad. No debemos olvidar como el medio ambiente debe formar parte de esta ecuación de crecimiento junto con el vector energético.
Nos avanza que para encajar estos términos en los próximos años será necesaria una fuerte inversión en los ámbitos de eficiencia y reducción de costes energéticos ya que es estratégico para la competitividad de las industrias.
Las empresas han aprendido a gestionar la compra de la energía, la relación con sus comercializadoras pero se requiere avanzar en el uso de la energía, se piensa más desde el lado de la oferta que no en el uso o en como se consume esta energía.
Otro aspecto que nos destaca es la dificultad actual para atraer capital inversor en eficiencia industrial especialmente debido a la erraticidad de la regulación que genera inseguridad en los inversores. La Sra. Guinda nos puso como ejemplo nuestra historia reciente en el tema de introducción de energías renovables.
Afrontar el problema no solo desde la óptica de la oferta de un producto indiferenciado y observarlo desde la óptica del uso de la energía permite identificar cómo esta energía no tiene el mismo valor para todos los consumidores, no todos pueden pagar lo mismo.
Muchas veces al hablar de energía se focaliza en el tema eléctrico, la Sra. Guinda es una gran conocedora del sector del gas y nos explicó que España ha hecho una apuesta estratégica por la regasificación que nos permitiría ser un gran puerto de entrada para el gas en el sur de Europa, desafortunadamente las interconexiones no han sido coherentes con este esfuerzo inversor y hoy nos encontramos con una sobreinversión en plantas regasificadoras que encarecen nuestra factura energética. El dilema se plantea si estas inversiones estratégicas deben ser financiadas con cargos a la tarifa o deben ser asumidas por los presupuestos generales mientras no sean requeridos por el sistema gasista.
Un panorama parecido sucede con el sector eléctrico donde decisiones estratégicas en cuanto a desarrollo de equipos de producción o implantación de renovables nos han llevado a unos sobrecostes de financiación que también recaen sobre las espaldas del consumidor.
Ante este escenario nos encontramos con planteamientos excesivamente simplistas por parte de muchos partidos políticos en temas energéticos, que más allá de buscar soluciones a problemas complejos se limitan a etiquetar como buenas o malas ciertas energías y no estudiar el papel estratégico que la energía tiene para algunas actividades.
Los asistentes le preguntan a la Sra. Guinda por qué Francia actúa como un tapón en el tema de interconexiones. Francia tiene una línea estratégica muy clara para su problema energético y no cuenta con España, dispone de plantas regasificadoras en los puertos del Mediterráneo, esta situación puede ser aprovechada por Italia y por Grecia para ser un punto de inyección de gas en Centroeuropa.
Tuvimos la oportunidad de hablar con la Sra. Guinda sobre la evolución del sector eléctrico en Catalunya y acerca de su evolución futura. Los sistemas eléctricos se van a hacer mucho más difíciles de gestionar, la introducción de nuevas formas de generar energía seguramente distribuida, la introducción de más tecnología que permitirán al consumidor un mayor nivel de interacción con la red, gestionando su consumo van a ser elementos clave para la mejora de la eficiencia pero va a implicar una mayor dependencia tecnológica y mayor implicación del consumidor, más allá de apretar un interruptor.
Le preguntamos por qué hay tantas dificultades para la instalación de placas fotovoltaicas o generadores eólicos por parte de los consumidores. La Sra. Guinde nos explica que esta ha sido un problema político y financiero más que un problema técnico.
Los costes de instalación de sistemas de generación especialmente solar se han reducido drásticamente en los últimos años, nos habla de alrededor del 75%, por lo que económicamente son viables y rentables. No obstante, partimos de una situación histórica en la que el Gobierno apostó por una promoción de energía solar muy ambiciosa con unos compromisos de retribución que los acontecimientos de los últimos años han puesto en cuestión en cuanto a sostenibilidad económica. Con este panorama el Gobierno lo que no necesita es perder demanda puesto que los compromisos existen.
Surge el tema de la propiedad de las infraestructuras eléctricas y gasistas, las diferencias entre la generación, o la distribución y los monopolios naturales como las redes. La Sra. Guinda es de la opinión de que no existen soluciones buenas o soluciones malas, universales para cualquier caso. Europa apostó por el mercado como garantía de equilibrio, en la práctica luego se presentan muchas cortapisas, modificaciones o exclusiones que dificultan el modelo económico. Actualmente nos encontramos con una política que mira al modelo y no mira al consumidor. Insiste en que éste es el cambio de modelo necesario, acercarse al problema energético mirando no desde la oferta de energía sino visto desde el usuario, para qué usa la energía el usuario, cómo la usa, si usa la adecuada.
Nos pone como ejemplo el transporte de mercancías por mar y cómo Gas Natural y Puertos del Estado están abordando un proyecto a nivel mundial para transformar los buques para que funcionen con GNL (Gas Natural Liquado).
Pudimos hablar con la Sra. Guinda de la necesaria transformación de la industria catalana que ha sabido adaptarse a la competencia mediante plataformas de compras y mejoras de precios y condiciones de contratación pero esta industria necesita un avance en las políticas energéticas para asegurar su competitividad más allá de su buena gestión.
Nos hubiera gustado poder seguir debatiendo con la Sra. Guindas acerca de la dimensión social de la energía, su efecto sobre la calidad de vida de las personas, la pobreza energética y los efectos macroeconómicos de sus efectos y sus costes, deberá quedar para otra ocasión.
Nuestro presidente cerró la sesión no sin antes agradecer a nuestra ponente su presencia y su amabilidad.
(Crónica Sr. Josep Ballart)